FUENTE: Posventa de Automoción

Bosch obtuvo unas ventas de 2.100 millones de euros en España durante el ejercicio fiscal de 2015, alcanzando un crecimiento del 12% en relación con el año anterior. Las ventas netas totales en nuestro país, incluyendo la facturación de las empresas no consolidadas y los suministros internos a las sociedades filiales, también registraron un desarrollo positivo, llegando hasta los 2.700 millones de euros. De cara a 2016, la compañía espera que las ventas en todo el mundo crezcan entre un 3% y un 5%, descontando ya los ajustes derivados del cambio monetario.

España continúa siendo un mercado importante para Bosch”, aseguró Frank Seidel, presidente del Grupo Bosch para España y Portugal, en un encuentro con los medios de comunicación el pasado 30 de junio en Madrid, en el que estuvo acompañado, entre otros, por Ricardo Olalla, vicepresidente de Ventas del Área Mobility Solutions de Bosch para España y Portugal.

En concreto, el área empresarial Mobility Solutions registró, en 2015, un importante crecimiento en España como consecuencia del incremento de la producción de vehículos, así como por la recuperación del mercado del automóvil. La demanda fue especialmente alta en los sistemas de asistencia al conductor basados en cámaras y radares. Otro factor positivo fue la buena evolución registrada en la cartera de productos de la nueva división Automotive Steering. La antigua joint-venture al 50%, ZF Lenksysteme, pasó, en 2015, a ser propiedad de Bosch en su totalidad.

Cabe destacar también que, durante el pasado ejercicio, Bosch invirtió 83 millones de euros en España, equivalente a un aumento del 25% en comparación con el año anterior. Por ejemplo, la planta de sensores de Madrid anunció, en 2015, un plan de inversión de 30 millones de euros en cinco años destinados a nuevas líneas de producción, mientras que la división de transporte ofrece a los principales fabricantes de automóviles, desde su centro de Barcelona, el servicio automático de llamadas de emergencia eCall a diez países en siete idiomas diferentes.

Sensores, software y servicios

Con su experiencia en los tres niveles del “Internet of Things” (IoT), sensores, software y servicios, Bosch está buscando nuevas oportunidades de negocio derivadas del IoT y de la conectividad, especialmente en el campo de la movilidad conectada, ahorrando tiempo y reduciendo el estrés en el aparcamiento, por ejemplo: los sensores especiales de ocupación en los parkings detectan e informan al conductor de las plazas libres (smart parking).

Según diferentes estudios, en España se necesita un promedio de 20 minutos para encontrar una plaza libre de aparcamiento. Bosch acorta esta búsqueda con los sensores ultrasónicos (que se fabrican, en parte, en la planta de Bosch en Madrid), que se están convirtiendo en estándar en un número cada vez mayor de vehículos que los emplean en la búsqueda de aparcamiento en la calle. La información se procesa en la ‘nube’ de Bosch para generar mapas digitales de las plazas libres de estacionamiento. Los conductores pueden acceder a los mapas a través de internet o del sistema de navegación de su vehículo, y dejarse guiar directamente hasta las zonas con disponibilidad de plazas libres.

También la propia fabricación de Bosch es conectada, con la puesta en marcha de más de un centenar de proyectos en funcionamiento en todo el mundo, algunos de ellos en España. Es el caso de la planta de sensores de Madrid, donde se fabrican principalmente sensores de aceleración para la activación del airbag y de ultrasonidos para la ayuda al aparcamiento, y que es responsable de la coordinación de las actividades de producción en otras plantas que fabrican este mismo producto en otras partes del mundo, cooperando en una red global de fabricación.

Una de las herramientas principales que hace esto posible es Dolphin, una aplicación desarrollada por Bosch, que muestra los ajustes actuales de las máquinas de todas las líneas de fabricación en el mundo que están trabajando en el mismo producto. De esta forma, la Industria 4.0 aumenta la disponibilidad de la maquinaria y mejora el control de inventarios y, consecuentemente, también la productividad y la competitividad.

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